• Las ventajas de prepararse en un preuniversitario

En la mayoría de los preuniversitarios trabajan equipos de profesores expertos en contenidos de área y en la construcción de instrumentos P.S.U.; que cumplen con los estándares de calidad y actualización y validez que ameritan. Aplican procedimientos sistemáticos y rigurosos, tanto en la formulación de las preguntas como en la estructuración final de las pruebas. Al seguir rigurosamente estos procedimientos, no tan solo se preocupan que los estudiantes cuenten con una medición adecuada de los procesos asociados al dominio de contenidos y al desarrollo de las habilidades, sino que también les aseguran que se someterán a un proceso de evaluación justo, válido y confiable.
En el preuniversitario, el estudiante, usualmente, encontrará apoyo docente a través de tutorías de reforzamiento, material académico (libros, guías y módulos) y ensayos que permiten ejercitar.

• ¿Cuánto tiempo antes es recomendable cursar un preuniversitario?

Depende de la situación particular de cada estudiante. Si su rendimiento es satisfactorio en el colegio, sería provechoso que comenzara a preparse en tercero medio, al menos en una asignatura obligatoria  (Matemática o Lenguaje y Comunicación). Así se habituará a organizar su tiempo y en cuarto medio comenzará una preparación más fuerte para la PSU. En cambio, un alumno con dificultades académicas, en cuarto debiera prepararse sólo para las pruebas obligatorias, para evitar la presión, o bien, hacer un preuniversitario cuando ya ha egresado del colegio, matriculándose en todas las asignaturas que le exige la carrera de elección. Esto, para que no se vea sobrepasado y pueda terminar su enseñanza media con mejores calificaciones, ya que éstas serán consideradas en el puntaje ponderado y no podrán ser modificadas.

• ¿A qué se atribuye el éxito de quienes alcanzan buenos puntajes?

Esto responde a un conjunto de características, tanto académicas como afectivas, que inciden en el proceso y que deben ser desarrolladas por el joven:

1. Motivación: es el ingrediente principal para iniciar y mantener una actividad académica, y finalizarla con éxito. Responsabilidad y persistencia: es necesario que el alumno asuma como prioritario y continuo el tiempo dedicado al estudio, asista a clases y participe en ellas.
2. Organización: es fundamental que se desarrolle un horario de estudio equilibrado, completo y realista. Además, se debe contar con un lugar apropiado para estudiar
3. Desarrollo y uso de estrategias de aprendizaje: para ello, se requiere que el alumno se conozca a sí mismo y según esto, elija estrategias efectivas para aprender más y mejor.
4. Sentimiento de autoeficacia y control de la ansiedad: un alumno sólo puede lograr sus metas si se siente capaz de ello y maneja adecuadamente el nerviosismo.

•  Preuniversitarios en Santiago y Regiones